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Mike Tyson y una blanca palomita de Dios |
¿Hasta
cuándo vamos a tener que leer o escuchar (como si no fuera
suficiente con la pieza misma, independientemente del universo en el
cual se la pone a funcionar cada vez) que Hamlet es una obra de
actualidad, de una vigencia sin igual, que resiste intacta el paso
del tiempo, etc?
A-aclaración:
lo del “universo donde se la pone a funcionar”, casi una obviedad
dirá algún prístino Proustista de poca fe, viene a colación de
que lógicamente no es lo mismo representar Hamlet en la época
victoriana, que en la quinta avenida del carajo, que en la actualidad
argentina por ejemplo.
Entonces,
si de actualidad se trata, podemos decir que hoy tenemos, no la
“suerte” porque sería injusto, sino la “posibilidad” de
estar viviendo un momento histórico-político-social lo
suficientemente determinante, crucial, y como tal “de una vigencia
sin igual” en términos de medios, representación y también de
construcción de esa “actualidad” -que podemos llamar de ahora en
mas y sin empacho “realidad” y que delimita de manera clara dónde
se libra hoy una de las batallas más urgentes-, la cual no se funda
sino a partir del uso que de las potencialidades del medio y sus
herramientas hacemos.
“El
uso no hace más que abrigar el sentido” (1)
Casi
todos los Hamlet, de hace rato hasta acá, finalmente se tratan de
una inmejorable oportunidad de posicionamiento para un determinado
actor, aunque mejor no voy a enroscarlos en “cuestiones
bizantinas que nada tienen que ver con lo que le pasa a la gente”
(2)
Repasemos
entonces muy rápidamente y de manera general, los tópicos más
comunes (los que produce la gente) a través de los cuales se ha
interpretado la obra de Shakespeare a lo largo de los años e
intentemos actualizarlo, a ver si resiste esta suerte de código
morsa:
(lo
que viene a continuación fue extraído de Internet; pero perdí la fuente. Eso sí, la
negrita es
mía)
“El
tema central de esta obra es la traición y la venganza. Una traición
por parte de los integrantes de una familia y algunos de sus
sirvientes. Un hermano que mata al otro para quedarse con la corona y
con la reina y un sobrino príncipe que desea vengar el asesinato de
su padre”
Todo
recontra actual, y sobre todo nuestro: corona, reina, príncipes
antojadizos. Y recontra nuevo: traición y venganza. Se parece a la
última de Alex de la Iglesia
Hamlet:
“Hijo del difunto rey y sobrino del actual. Este personaje se
caracteriza por la justicia. Al enterarse que su padre ha sido
asesinado por su tío finge estar loco para vengarse de esa terrible
traición. Para este personaje, el mundo está podrido, igual que el
rey ,la reina y la corte. Pero la podredumbre que observa no puede
ser soslayada como antes de la muerte de su padre; ahora se halla
inmerso en ella y debe combatirla” El
héroe colectivo. Acá en buenos aires el sesenta por ejemplo, que
tiene como 500 ramales y al igual que Dios parece que atiende en
todos lados, pero no)
Claudio:
“Rey
de Dinamarca. Este personaje se caracteriza por la hipocresía, ya
que finge ser una persona honrada y justa durante su reinado” El
poder mediático
Polonio:
“Lord chambelán. Sumamente leal al rey y a la reina” Me
quedo con el concepto de lealtad
Gertrudis:
“Reina de Dinamarca y madre de Hamlet. Ella es una persona ingenua,
ya que no se da cuenta de lo que ha hecho su actual esposo, el rey y
los motivos por los que ha llevado a cabo este hecho” Aquí
la madre no es una única persona con gran poder de mando como podría
pensarse sino, otra vez, una “matriz” social, colectiva,
manipulada durante años por la realidad distorsionada impuesta por
del Rey)
Fantasma:
“En este caso, el fantasma es la persona que se comunica con Hamlet
para hacerle saber la verdad sobre la muerte de su padre”
(Solo una aclaración: un fantasma no es algo o alguien que no
existe, sino una emanación incorpórea, un viento por ejemplo, de
algo o alguien que estuvo alguna vez)
Así
que, -y resumiendo antes que lo claro resulte obvio y a algunos les
empiece a pesar la calavera chillona mas de lo recetado por el profe
de pilates- al que no quiera ponerle el “ser o no ser” a esta
realidad, siempre le quedará hacer de Hamlet en un teatro de la
calle Corrientes, que es ¡TU MACHT!
- Roland Barthes, semiólogo francés.
- C. F. K (Amigo personal de Roland Barthes, semiólogo francés)Texto: UlisesFoto: El espectador